La línea inspirada en la tenista Chris Evert, quien perdió su pulsera de diamantes durante el US Open en 1978, esta vez se presenta con una renovada selección de joyas como pulseras, zarcillos, anillos y gargantillas delicadas y elegantes, con un patrón simétrico de diamantes.
Patricia Olivares Taylhardat creó esta colección destacando la presencia del lujo en piezas multicolores, a diferencia de lo usual, es decir, de aquellas prendas donde solamente una gema o algún brillante es protagonista. Indicó que con esta línea, Braganza se encuentra rompiendo esquemas por su originalidad y estilo.
“Estamos siempre innovando, vamos más allá de la joyería tradicional, de lo que las marcas te dan, trabajamos en nuestra propia imagen, en poner nuestro propio ADN en lo que vendemos”, dijo.
Para presentar la colección, la joya de Altamira Village realizó una sesión de fotos previamente, con un enfoque femenino y actual, acorde con la línea. Olivares habló de dicha producción argumentando estar llena de frescura y modernidad.
Las imágenes fueron realizadas en las instalaciones del Caracas Raquet Club, para recrear la vida de una jugadora de tenis moderna. “Quisimos hacerlo diferente, con pelotas rosadas y azules en lugar de las típicas verdes, la raqueta, todo orientado a la feminidad”.
Para llevar a cabo la sesión, Braganza contó con un valioso equipo de trabajo: la modelo Karla Vieira, el fotógrafo Rafael Franceshi, la maquilladora Judith Padrón. Junto a ellos, colaboradores de la joyería dijeron presente: Jennifer Albornoz a cargo de la conceptualización gráfica de la colección, así como Beatriz Nieto, gerente de mercadeo y Lissette Casanova, gerente de ventas de la firma de joyas.